Recibimos carta de nuestros familiares donde nos comunican el accidente ocurrido en un barco que transportaba carga peligrosa y afectaba a toda la zona de Fisterra y los alrededores. Nos decían que hubo explosión y que una nube de humo cubrió el cielo. Asustados, generó mucha confusión y luego tuvieron que trasladarse fuera de su hogar. En el pueblo solamente se quedó nuestro primo JOSÉ ENRIQUE, que era médico y tuvo que atender a muchas personas: los de dentro del barco, que de 31 fallecieron 23, y a los habitantes que necesitaban su ayuda y asistencia como profesional.
Desde Argentina, yo lo viví con mucho temor. Temía por mi querida Fisterra y sus habitantes. Fueron días, meses y años muy tristes, y aún hoy en muchos queda el miedo al revivir la situación.
ANGUSTIAS
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